¿Cuántas veces, estando en un centro comercial o en el súper, haces compras innecesarias? Seguramente, muchas veces. Sin embargo, pocos se ponen a pensar que nos obligan a realizar compras no planeadas gracias a todo tipo de trucos.
Cajas incómodas
Más del 60% de las personas descartan los objetos innecesarios mientras esperan su turno en la caja. Para no dejar que el cliente se arrepienta de las compras espontáneas, las cajas están organizadas de tal forma que es básicamente imposible sacar las cosas innecesarias, sobre todo, si están en un carrito.
Descanso sin descanso
En las áreas de comida, puedes descansar y comer algo antes de continuar con tus compras. Sin embargo, no lograrás pasar mucho tiempo en esto: los muebles son incómodos, las mesas están muy pegadas, el ruido y el eco hacen lo suyo. Esto ayuda a los centros comerciales a retener a la gente durante mucho tiempo y garantizar el flujo constante de los clientes.
No hay ventanas ni reloj
Todos sabemos que en los casinos no hay reloj ni ventanas, esto se hace para que la persona pierda la noción de la realidad y pase el mayor tiempo (y dinero) posible en este establecimiento. Los centros comerciales se basan en el mismo principio: no tienen reloj y las ventanas son muy escasas.
Tiendas acogedoras
Todos los pasillos en los centros comerciales están bien iluminados, y de las bocinas suena música fuerte. Además, la baldosa refleja bien tanto la luz, como el sonido, intensificando el efecto. Sin embargo, cuando entras a una tienda, el piso se vuelve suave, la luz menos aguda, y la música, más tranquila y agradable. Todo esto crea la sensación de comodidad y te hace pasar más tiempo en la tienda.
Espejos engañosos en los probadores
Por más triste que sea, los espejos en los probadores están hechos de tal forma que luzcamos más esbeltos, bronceados y altos. Por ejemplo, en algunas tiendas de ropa interior, a los espejos se les agrega un pigmento de color rosa, gracias al cual la piel luce bronceada. Esto ayuda notablemente a incrementar las ventas: la práctica muestra que cuanto más nos gustamos en ciertas prendas, más probable es que las consigamos.
Reubicación de mercancía
Si durante cierto tiempo realizas las compras en la misma tienda, sabes bien dónde se encuentra la mercancía y vas directamente a lo que necesitas sin prestar atención a otros mostradores. Después de reubicar los alimentos, el cliente se ve obligado a mirar nuevamente todas las estanterías buscando el producto que necesita, y de paso agregando objetos innecesarios a su carrito.
Iluminación bien planeada
Según las observaciones, se venden mejor los plátanos de cierto tono de color amarillo. Esta regla funciona también con otras frutas y verduras, lo cual bien saben los dueños de las tiendas. El problema de color se soluciona gracias a la iluminación: la luz “correcta” es capaz de hacer cualquier mercancía más atractiva.
Demanda artificial
Veamos el ejemplo de todo tipo de jugos. ¿Alguna vez has notado que en algunas áreas de la tienda aparecen “espacios”? Nos parece que esta mercancía es tan buena que tiene mucha demanda, por lo cual también a nosotros nos vendría bien. Desafortunadamente, el jugo es retirado por los mismos empleados de la tienda para crear una ilusión de demanda.
Truco de inseguridad
Los espejos ubicados en las tiendas afuera de los probadores juegan un papel importante en las ventas: si la persona es insegura de sí misma o simplemente no luce tan bien, la imagen de ella que aparece todo el tiempo en los espejos les hace recordar esto. Este truco básicamente las obliga a elegir algo nuevo que podría mejorar su aspecto físico.
Juego de contrastes
Supongamos que en una repisa hay dos teteras parecidas. Una de ellas cuesta 99.99 dólares, y la otra, 79.99. Las ventas de una tetera “económica” son altas, pero la que está más cara es ignorada casi siempre. ¿Por qué? Lo que pasa es que al realizar una compra, no pensamos en el precio real del objeto, sino en que hacemos un buen negocio.
Bonus: 10 Trucos de maquilladores profesionales que resultarán útiles a cualquier mujer
En el arsenal de los maquilladores siempre encontraremos muchos secretos con los que el trabajo que hacen resulta del todo admirable. A veces, estos trucos incluso ayudan a un profesional a ahorrar tiempo y reducir el gasto en cosméticos. Por eso, decidimos averiguar en qué se apoyan los artistas de maquillaje con amplia experiencia a la hora de desarrollar su trabajo. Estamos convencidos de que te serán de gran utilidad.
1. Limpia las esponjas antes de aplicarte un producto
Limpia tus esponjas y brochas de maquillaje y sécalas con una toalla justo antes de usarlos. Extiende el producto sobre la piel haciendo movimientos como “palmaditas”. Este consejo te ayudará no solo a ahorrar dinero en cosméticos, dado que las esponjas, de esta manera, retendrán menos producto dentro, sino que también servirán para crear una imagen natural. La base de maquillaje, aplicada con este método “húmedo” aportará más naturalidad. Además, el brillo del resaltador y de las sombras de ojos durará más tiempo si se aplican con una brocha húmeda.
2. No guardes los productos de maquillaje en el cuarto de baño
Además de que en el ambiente cálido y húmedo proliferan las bacterias, la humedad y las altas temperaturas son inevitables en cualquier cuarto de baño, también acortan la vida útil y afectan la calidad de los productos cosméticos. Los maquilladores profesionales incluso colocan bolsitas de gránulos absorbentes en las maletas con cosméticos (estos que encuentras en las cajas de zapatos para evitar una humedad excesiva).
3. Haz que tus cejas se vean naturales
Aplica sobre tu mano cualquier lápiz de maquillaje cuyo color quede bien con el de las cejas. Con una brocha plana, recoge un poco del producto de tu mano y aplícalo a tu ceja en la dirección del crecimiento de los pelos para añadir visualmente densidad. Para arreglar las cejas, prueba a usar cera masculina para bigotes: se fijará perfectamente y será del todo invisible. Aplícala con un cepillo y solo en la punta de la ceja. De esta manera, el maquillaje se verá más natural.
4. Disimula las pequeñas arrugas
Si tienes arrugas o pliegues en los párpados que te gustaría disimular, utiliza para el maquillaje las sombras mate. Y si no quieres renunciar al brillo, aplica sobre las sombras mate un poco de las que tengan partículas reflectantes, pero solo en el centro del párpado superior.
5. Utiliza una paleta
Los profesionales del maquillaje, a menudo, mezclan diferentes productos para lograr ese efecto tan deseado. Para lograrlo, estos artistas recurren a una paleta de metal especial, pero también te puede servir una tapa de plástico habitual de una crema o un espejo. A diferencia de tu propia mano, esta superficie no calentará ni absorberá el producto. Puedes mezclar tonos de lápiz labial, base de maquillaje, sombras, cualquier cosa. Tú, como artista, podrás crear por tu cuenta el color y la textura necesarios en el momento.
6. Cada tono de rubor, en su lugar
Aplica el colorete de tonos rosa y rojo sobre las manzanas de tus mejillas, tonos melocotón, justo en la línea que observas un poco por encima de tus pómulos, y los bronce, debajo de estos. El profesional del maquillaje James Vincent argumenta que de esta manera se puede recrear un rubor natural que aparece cuando la sangre se acerca a la superficie del rostro. Si aplicas el rubor de este modo antes de la base de maquillaje, sobresaliendo, se verá aún más natural.
7. Escoge el color de cosméticos correctamente
Con frecuencia, acabamos quedando decepcionadas por cómo se ve en los labios un nuevo lápiz labial. Al fin y al cabo, cuando lo probamos por primera vez en el dorso de la mano, el color parecía bastante distinto. Esto sucede porque el color de la piel en nuestros labios es más vivo que en las manos. Por lo tanto, escogiendo un pintalabios, en una tienda, es mejor probar el color sobre las yemas de los dedos, donde el color de la piel es casi el mismo que en los labios.
Al elegir una base, tampoco vale la pena probarla en el dorso de la mano, donde el color de la piel es más oscuro que en el rostro. Cuando estás en la tienda, aplica un poco de la base sobre la piel en la parte interior del antebrazo o en el lugar de transición de la cara al cuello y evalúa con la luz natural del día cómo se ve este color en tu piel.
8. No te olvides del kajal
Maquillándote los ojos, no te olvides de prestar atención también a la línea interior del párpado inferior. Es esta quien suele revelar unos ojos cansados. Un lápiz oscuro (kajal o khol) hará que tus ojos se asemejen a los de un “gato” y los volverá más expresivos; uno claro, añadirá volumen, haciendo que tu mirada se vuelva más abierta.
9. Quítate el maquillaje sin gastos adicionales
La maquilladora de Hollywood, Toby Fleischman, afirma que su desmaquillador favorito, el que encontró después de largos años de búsqueda, es un champú infantil normal y corriente. Quita perfectamente incluso el maquillaje más resistente, no reseca la piel y, lo más importante, ¡no provoca lágrimas! También Toby aconseja utilizarlo para lavar las brochas de maquillaje.
10. Cambia el color de tu concealer
Para enmascarar las imperfecciones de la piel, los maquilladores profesionales recurren a concealers de diferentes colores: para las ojeras, uno rosa, para enrojecimientos, el verde. Superponiéndolos el uno encima del otro, estos colores forman un gris neutro que luego es más fácil de disimular con una base de maquillaje. Si el corrector carece de color, puedes utilizar un lápiz labial rojo (un poquito) para las ojeras y sombras verdes mate para los granitos. Simplemente, mézclalos con tu concealer habitual.